Perro o gato, la decisión no solo influye en el peludo inquilino de tu casa sino que dice mucho de tu personalidad. Mientras que las personas que optan por el can son más familiares y responsables, quienes prefieren convivir con un gato suelen ser más creativos y urbanos.

Con este test podrás descubrir con cuál te identificas.

¿Qué tipo de vivienda tienes?

¿Sueles pasar largas temporadas fuera de casa por cuestiones personales o laborales?

¿Eres perfeccionista en el hogar?

¿Te gusta controlar en cada momento donde están los que te rodean?

¿Soportas bien los sobresaltos y ruidos?

¿Te preocupas con facilidad?

¿Lealtad o independencia?

¿Te gusta la limpieza?

¿Te sientes feliz cuando llegas a casa y te reciben con los brazos abiertos?

¿Quieres comprar un perro o un gato pero, ¿a quién irá destinada la mascota?

¿Agradeces llegar a casa en pleno invierno y que esté calentita?

¿Buscas tener siempre alguien cerca o eres solitario?

¿Te gusta salir a pasear aunque haya factores climatológicos adversos?

¿Quieres un animal para verlo continuamente?

¿Tienes hijos?

¿Eres una persona hogareña?

¿Buscas un amigo o un compañero de apartamento?

¿Estás dispuesto a aflojar el bolsillo o intentas ahorrar?

¿Te pone de los nervios la falta de disciplina?

Resultado

PERRO

Tu mejor opción es tener un perro. Buscas en tu mascota un amigo, la fidelidad y el compañerismo de los perros. Además, no te importa en absoluto sacrificarte para tenerle contento y, lo más importante, tienes los medios para hacerlo.

GATO

Eres una persona de gatos porque tu carácter es el más compatible con su forma de ser: independiente, solitario, confiado… No quieres tener ataduras con nadie, te gusta ser libre y no dar explicaciones a nadie; es decir, como los gatos. Además, por tu modo de vida no podrías cuidar ni proporcionar la atención que un perro demanda.