Y aunque Elvis jamás en su vida se cruzó a un oso polar, logra dar la respuesta correcta en el 97 por ciento de las ocasiones, siendo casi tan exacto como las pruebas de embarazo para humanos.

Tras conocer los últimos estudios sobre el uso experimental de perros para detectar el cáncer en las muestras de pacientes con cáncer de pulmón, útero y colon, en el Centro CREW del Zoo de Cincinnati pensaron en utilizar animales para descubrir el estado de gestación de las osas polares, buscando así mejorar los procedimientos de cuidados sobre estos animales.

Para concretar el proyecto, el equipo contactó a Matt Skogen, del Centro de Alto Rendimiento de Adiestramiento de Perros Iron Heart, de Kansas, quien en enero de 2013 puso a Elvis a trabajar para que aprendiera a detectar determinadas proteínas presentes en las heces de las hembras de la especie estudiada para detectar su preñez. Para su entrenamiento, Elvis inspeccionó las muestras de 22 osas polares de 14 zoológicos de Estados Unidos.

Ahora bien, ¿cómo hace Elvis para comunicar sus resultados? Si se sienta sobre sus patas traseras y emite un ladrido, los expertos saben que están ante un individuo en período de gestación. Por su parte, la respuesta acertada le brinda al can un premio que consiste en algunas golosinas y un rato con su juguete preferido: un pato de goma.

El “Elvis Test” no sólo no es invasivo para los osos, sino que también es muy sencillo para los cuidadores de los zoológicos de llevar adelante: sólo deben recoger las muestras para que Elvis las estudie con su olfato.

Las hembras de oso polar pueden dar a luz sólo cuatro o cinco veces en su vida, y tienen sólo uno o dos cachorros cada vez. Además de esta baja tasa de embarazo, la especie suele sufrir falsos embarazos, que comúnmente llegan a engañar a los cuidadores.

La eficacia del “Elvis Test” permitirá a los conservaduristas actuar a tiempo y aumentar los cuidados, para separar a las hembras de los machos, reforzar su observación y prepararse para la llegada de las crías.

Mejorar los resultados de la reproducción en cautiverio de los osos polares, una especie gravemente amenazada por los impactos del cambio climático, no sólo ayudará a los investigadores a aprender más sobre la gestación, sino que también jugará un papel fundamental en la prosperidad de la especie.

Si la tendencia no es revertida, para mediados de este siglo podríamos perder dos tercios de los osos polares del planeta, de ahí lo importante de este tipo de iniciativas y planes de acción para su supervivencia.

¿Qué piensas sobre el entrenamiento de Elvis?

Fuente: Animal Planet